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Cómo cuidar los dientes con una ortodoncia

Tanto si tu pequeño acaba de empezar con la ortodoncia como si tú mismo te estás preparando para este procedimiento, ¡enhorabuena!

Ahora estáis más cerca de tener una sonrisa más sana, bonita y reluciente. Durante el tiempo que tengais la ortodoncia, es esencial proteger vuestra boca siguiendo unas guías básicas de cuidado.

En los primeros días tras la colocación de los brackets, es posible que se sienta cierto nivel de malestar en los dientes. Esto es algo normal, y el malestar pasará pronto. ¡Las buenas noticias es que esta sensación indica que los dientes ya han empezado a moverse hacia su lugar correcto!

De mientras, nunca es demasiado temprano para empezar con una higiene oral adecuada, haciendo cambios en los hábitos diarios para proteger los dientes y boca mientras los brackets hacen su trabajo. Cuanto antes empieces a tener en cuenta estos consejos, más sanos estarán los dientes luego.

Cómo cuidar de los brackets

Cuando nos ponemos brackets, el objetivo es mejorar el aspecto y salud de nuestra boca y dientes, creando así una sonrisa hermosa y reluciente.

Sin embargo, sin un cuidado adecuado de los dientes, es posible que se desarrollen manchas, caries o problemas de encías. Esto hace que el cuidado de los dientes sea imprescindible mientras los brackets terminan su cometido. ¿En qué se diferencia este tipo de higiene dental del normal?

Cepíllate con regularidad

A la hora de cepillarse los dientes con el aparato puesto, es una buena idea seguir el plan tres por tres: tres veces al día durante tres minutos cada vez.

Elige una pasta fluorada y un cepillo de cerdas suaves. Quita cualquier tipo de accesorio removible y empieza a limpiar. Durante los próximos tres minutos, empieza desde arriba y limpia cada diente con un movimiento circular suave.

Ten cuidado de pasar el cepillo por debajo del aparato para asegurarte de limpiar todo. Una vez hayas terminado con la fila superior, repite en la inferior, empezando desde abajo.

Hilo dental y enjuague bucal

Ya que un cepillo dental no puede alcanzar todos los huecos y recovecos entre dientes, deberías recurrir al hilo dental o cepillos interdentales.

Utiliza hilo o un cepillo interdental para introducirlo entre los dientes y sacar cualquier partícula de comida que el cepillo no haya alcanzado. Una vez hecho esto, enjuágate con colutorio para alcanzar todas esas áreas que necesitan de atención extra.

Mírate en el espejo

Una vez hayas completado estos pasos, mírate la sonrisa en el espejo. Mira con detenimiento para asegurarte de que no se haya quedado ningún resto de comida, y revisa los alambres para ver si alguno se ha salido de su sitio.

Es recomendable revisar los alambres por uno mismo para así poder identificar cualquier problema y notificar al ortodoncista cuando sea necesario.

Una vez hecho esto, podemos reponer los accesorios que hayamos removido antes de empezar con el cepillado.

Escucha a tu ortodoncista

Un ortodoncista hace mucho más que colocar los brackets y reajustarlos de tiempo en tiempo. Un ortodoncista también está ahí para enseñarte cómo cuidar de tu boca y del aparato que lleves en ella.

Cuando se pone el aparato por primera vez, el ortodoncista se sentará contigo y te explicará las mejores maneras de cepillar y limpiar tus dientes, además de ofrecerte recomendaciones para evitar problemas. El ortodoncista también te dirá qué hacer si se rompen los alambres o en caso de dolor.

Cuando estés hablando con tu ortodoncista y su equipo, te dirán qué puedes comer y qué no, y cómo ciertas comidas y bebidas pueden impactar en tu salud bucodental. Es posible que algunas de estas restricciones te frustren, pero tener cuidado con lo que comes podrá evitar problemas mayores en un futuro. ¡Y cuantos menos problemas haya, antes terminará la ortodoncia!

Ten cuidado con lo que comes

Las restricciones a la hora de comer son uno de los temas más peliagudos en la ortodoncia. Ya habrás oído de algún amigo o compañero qué tienes que evitar y el por qué.

Sí, necesitarás ajustar tus hábitos de alimentación mientras estés con el aparato puesto, pero no es un ajuste demasiado difícil. Además, ¡es sólo temporal!

Comidas a evitar

Hay ciertos alimentos que si bien no son exactamente incomibles, es recomendable evitarlos en la medida de lo posible.

Alimentos duros: Además de frutos secos o verduras crudas como la zanahoria, esto incluye cualquier tipo de pan duro, como los bordes de la pizza. Requieren mucha fuerza para morder a través de ellos, lo que puede dañar los brackets.

Carne dura: los snacks típicos de carne curada o seca pueden aflojar el arco dental y los brackets. Tampoco es aconsejable consumir cerdo o ternera poco hecho.

Hielo: No pasa nada si tienes hielo en tu bebida, pero **no se te ocurra morder el hielo**, esta es una de las razones más corrientes por las que nuestros pacientes acuden por daños en los brackets.

Caramelos duros: Ya de por sí no son recomendables para la salud bucodental, pero te puedes ver tentado a masticar el caramelo y dañar así los brackets y el arco dental.

Alimentos pegajosos: Los alimentos pegajosos tienden a quedarse pegados en el aparato, haciendo que la limpieza se vuelva una pesadilla.

No comestibles: Somos muchos lo que tenemos la manía, inconsciente, de masticar bolígrafos o mordernos las uñas, malos hábitos que pueden afectar al estado de nuestros brackets.

Comidas seguras

A la hora de buscar alimentos que puedas comer con brackets, asegúrate de evitar cualquier cosa que pueda pegarse a los mismos. Hay muchos alimentos que se pueden comer sin poner en riesgo el tratamiento, así que tranquilo. En general, cualquier alimento con textura suave está recomendado.

Frutas blandas: uvas, nectarinas, kiwis, mandarinas, plátano.

Verduras: Hervirlas, o cocinarlas al vapor, ayudará para hacerlas más blandas.

Productos lácteos: El yogur y el queso son buenas alternativas de las carnes duras.

Carnes blandas: Pollo, pavo, embutidos, pescado.

Postres: Gelatinas, purés de frutas, smoothies, helado, flanes, etc.

Granos blandos: Pasta y arroz cocinado.

Pan blando: Tortillas, magdalenas, pan bimbo, tortitas.

Huevos: otra buena alternativa para las carnes duras.

Consejos a la hora de comer

Además de prestar atención a lo que se come, es importante prestar atención a cómo se come.

Es más fácil comer con un tenedor o cuchara, en vez de morder directamente lo que estás comiendo.

Sí, comer pizza con tenedor o cortar una manzana en pedacitos antes de comer no es lo más cómodo, pero reducirá el riesgo de romper los brackets o causar molestias.

Si un ajuste reciente te causa dolor, come cosas frías como yogur helado. El frío de estos alimentos ayudará a reducir el malestar en la boca.

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