¿Cómo prevenir las caries? Consejos de un Odontólogo

¿Te has preguntado alguna vez cómo prevenir las caries? Las caries son una de las enfermedades más comunes y más molestas que afectan a nuestra salud bucodental. No solo pueden causarnos dolor, sensibilidad, infección o pérdida de los dientes, sino que también pueden afectar a nuestra autoestima, nuestra confianza y nuestra sonrisa.

Las caries se producen por la acción de las bacterias que habitan en nuestra boca, que se alimentan de los restos de comida que quedan en los dientes, especialmente de los azúcares, y producen ácidos que erosionan el esmalte, la capa más externa y dura del diente. Con el tiempo, estos ácidos pueden llegar a perforar el esmalte y afectar a las capas más profundas del diente, provocando complicaciones más graves.

La buena noticia es que las caries se pueden prevenir con unos hábitos sencillos y saludables. En este artículo te vamos a dar algunos consejos prácticos para prevenir las caries y mantener una buena salud bucodental. Estos consejos se basan en tres pilares fundamentales: mantener una buena higiene bucal, comer para proteger los dientes y visitar al dentista regularmente.

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¿Qué son las caries y qué las causa?

Las caries son lesiones que se producen en el esmalte, la capa más externa y dura del diente, por la acción de las bacterias que habitan en la boca. Estas bacterias se alimentan de los restos de comida que quedan en los dientes, especialmente de los azúcares, y producen ácidos que erosionan el esmalte. Con el tiempo, estos ácidos pueden llegar a perforar el esmalte y afectar a la dentina, la capa intermedia del diente, e incluso al nervio, provocando complicaciones más graves.

Existen varios factores que favorecen la aparición de caries, como una mala higiene bucal, una dieta rica en azúcares y alimentos pegajosos, una saliva ácida o escasa, una anatomía dental irregular o defectuosa, o enfermedades que causan reflujo o vómitos frecuentes.

La prevención es la mejor forma de evitar las caries y sus consecuencias. En este artículo te vamos a dar algunos consejos prácticos para prevenir las caries y mantener una buena salud bucodental.

Consejos sobre como prevenir las caries

Mantener una buena higiene bucal para prevenir las caries

La higiene bucal es el hábito más importante para prevenir las caries. Se recomienda cepillarse los dientes al menos dos veces al día, preferiblemente después de cada comida, durante dos minutos. El cepillado debe ser suave pero eficaz, abarcando todas las superficies de los dientes, tanto externas como internas, así como la lengua y las encías.

Cepillarse los dientes correctamente para prevenir las caries

Para cepillarse los dientes correctamente se debe usar un cepillo adecuado al tamaño y forma de la boca, con cerdas suaves o medias, que no dañen el esmalte ni las encías. Se debe cambiar el cepillo cada tres o cuatro meses o cuando esté desgastado. También se debe usar una pasta dental con fluoruro, que refuerza el esmalte y previene la desmineralización. El fluoruro también se puede encontrar en algunos colutorios o geles dentales.

El cepillado debe realizarse con movimientos circulares o de arrastre, desde la encía hacia el borde del diente. Se debe evitar hacer movimientos horizontales o muy bruscos. Se debe cepillar cada parte del diente, tanto la cara externa como la interna y la masticatoria. También se debe cepillar la lengua, que alberga muchas bacterias, con movimientos de atrás hacia adelante. Se debe enjuagar la boca con agua al finalizar el cepillado.

Usar hilo dental y enjuague bucal

El cepillado no es suficiente para eliminar toda la placa bacteriana que se acumula entre los dientes. Por eso, se recomienda usar hilo dental al menos una vez al día, preferiblemente por la noche, para limpiar los espacios interdentales. El hilo dental se debe deslizar suavemente entre los dientes, sin presionar ni dañar las encías, y formando una C alrededor de cada diente. Se debe usar una porción nueva de hilo para cada espacio.

El enjuague bucal es otro complemento que ayuda a prevenir las caries, ya que elimina las bacterias que quedan en la boca después del cepillado y el uso del hilo dental. Se debe elegir un enjuague bucal adecuado a las necesidades de cada persona, y seguir las indicaciones del fabricante o del dentista sobre la cantidad y el tiempo de uso. Se debe evitar enjuagarse con agua después de usar el enjuague bucal, para no disminuir su efecto.

Cambiar el cepillo y la pasta dental regularmente

El cepillo y la pasta dental son los instrumentos básicos para mantener una buena higiene bucal. Sin embargo, con el uso y el paso del tiempo, pueden perder su eficacia o incluso convertirse en un foco de contaminación. Por eso, se recomienda cambiar el cepillo cada tres o cuatro meses, o cuando las cerdas estén desgastadas o deformadas. También se debe cambiar la pasta dental cuando se acabe el tubo, o cuando haya pasado su fecha de caducidad.

Además, se deben seguir algunas medidas de higiene para conservar el cepillo y la pasta dental en buen estado. Se debe lavar el cepillo con agua después de cada uso, y guardarlo en un lugar seco y limpio, evitando el contacto con otros cepillos. Se debe cerrar bien el tubo de la pasta dental después de cada uso, y evitar que entre en contacto con el cepillo o con la boca.

Comer para proteger los dientes

La alimentación también juega un papel importante en la prevención de las caries. Algunos alimentos pueden favorecer la formación de placa bacteriana y ácidos que dañan el esmalte, mientras que otros pueden ayudar a fortalecerlo y protegerlo.

Reducir el consumo de azúcares y alimentos pegajosos

Los azúcares son el principal alimento de las bacterias que causan las caries. Por eso, se recomienda reducir el consumo de alimentos y bebidas que contengan azúcares añadidos, como los dulces, los refrescos, los zumos industriales, los cereales azucarados o las galletas. También se deben evitar los alimentos pegajosos o que se adhieren a los dientes durante mucho tiempo, como los caramelos, la miel o los frutos secos.

Si se consumen estos alimentos, se debe hacer con moderación y preferiblemente durante las comidas principales, ya que la saliva ayuda a neutralizar los ácidos y a limpiar los dientes. También se debe cepillar los dientes inmediatamente después de consumirlos, o al menos enjuagarse la boca con agua.

Aumentar el consumo de alimentos ricos en calcio y fluoruro

El calcio y el fluoruro son dos minerales esenciales para mantener unos dientes fuertes y sanos. El calcio forma parte del esmalte y ayuda a repararlo cuando se produce una desmineralización por los ácidos. El fluoruro también contribuye a remineralizar el esmalte y a prevenir su erosión.

Los alimentos ricos en calcio son los lácteos (leche, yogur, queso), las verduras de hoja verde (espinacas, brócoli, col rizada), los frutos secos (almendras, nueces) o las legumbres (lentejas, garbanzos). Los alimentos ricos en fluoruro son el pescado (salmón, sardinas), el té verde o negro o el agua fluorada.

Beber agua y masticar chicle sin azúcar

Beber agua es otro hábito saludable que ayuda a prevenir las caries. El agua ayuda a hidratar la boca, a estimular la producción de saliva, a eliminar los restos de comida y a neutralizar los ácidos. Se recomienda beber al menos dos litros de agua al día, y enjuagarse la boca con agua después de cada comida o de consumir alimentos o bebidas ácidas.

Masticar chicle sin azúcar también puede ser beneficioso para prevenir las caries, siempre que se haga con moderación y después del cepillado. El chicle sin azúcar estimula la secreción de saliva, que tiene un efecto limpiador y protector sobre los dientes. Además, algunos chicles contienen xilitol, un edulcorante natural que inhibe el crecimiento de las bacterias que causan las caries.

Visitar al dentista regularmente

Otro consejo fundamental para prevenir las caries es visitar al dentista regularmente, al menos una vez al año, o cada seis meses si se tiene algún factor de riesgo. El dentista puede detectar y tratar las caries en sus etapas iniciales, antes de que causen daños mayores o complicaciones. También puede realizar una limpieza profesional, que elimina el sarro y la placa bacteriana que el cepillado no puede alcanzar.

Realizar revisiones y limpiezas periódicas

Las revisiones y limpiezas periódicas son procedimientos sencillos e indoloros que se realizan en la consulta del dentista. En una revisión, el dentista examina los dientes, las encías y la boca en general, buscando signos de caries, gingivitis, maloclusión u otras anomalías. Si detecta alguna caries, puede tratarla mediante una obturación o empaste, que consiste en limpiar la cavidad y rellenarla con un material restaurador.

En una limpieza, el dentista usa instrumentos especiales para eliminar el sarro y la placa bacteriana que se acumulan en los dientes y las encías. El sarro es una capa dura y amarillenta que se forma por la mineralización de la placa bacteriana. El sarro favorece la aparición de caries y de enfermedades periodontales, como la gingivitis o la periodontitis. La limpieza también puede incluir un pulido dental, que elimina las manchas superficiales y mejora el aspecto de los dientes.

Aplicar selladores y fluoruros si es necesario

Los selladores y los fluoruros son tratamientos preventivos que el dentista puede aplicar en algunos casos para proteger los dientes de las caries. Los selladores son unas capas finas de resina que se colocan sobre las superficies masticatorias de los molares y premolares, que son las más propensas a desarrollar caries por su anatomía irregular y difícil acceso. Los selladores cubren los surcos y fisuras de estos dientes, impidiendo que se acumulen los restos de comida y las bacterias.

Los fluoruros son sustancias que se aplican sobre los dientes para fortalecer el esmalte y prevenir su desmineralización por los ácidos. Los fluoruros se pueden aplicar en forma de gel, barniz o espuma, mediante una férula o un cepillo especial. Los fluoruros también se pueden ingerir mediante pastillas o gotas, siempre bajo prescripción médica.

Como has podido comprobar, prevenir las caries es posible y está en tus manos. Las caries son una de las enfermedades más comunes y más molestas que afectan a nuestra salud bucodental, pero se pueden evitar con unos hábitos sencillos y saludables.

Prevenir las caries no solo te ahorrará problemas dentales, sino que también te aportará beneficios para tu bienestar general. Tener unos dientes sanos, fuertes y bonitos te hará sentir más seguro, más confiado y más feliz. Además, podrás ahorrar dinero en tratamientos dentales más costosos y complejos.

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